Un crédito es una herramienta financiera que te puede ser de ayuda si deseas comprar un nuevo auto, hacer reformas en tu hogar, financiar un plan de estudios o mejorar tu negocio o empresa. Sin embargo, debes asegurarte de usarlo correctamente para que no tengas problemas, hoy te traemos estos consejos para que tener en cuenta antes de sacar un crédito financiero. ¡Seguí leyendo!
Un crédito siempre es otorgado, después de analizar tu capacidad de pago. De esta manera el banco o entidad prestamista verifica tu solvencia y se asegura que puedas devolver el total del dinero prestado más los intereses acumulados durante el tiempo de financiamiento establecido.
Esta herramienta te brindará el apoyo necesario, pero cuidado, debes aprender cómo manejar tu dinero y poder construir un buen historial crediticio.
Analiza si realmente necesitas sacar un crédito
A la hora de necesitar dinero muchas personas, lo primero que hacen, es ir al banco donde son clientes y solicitarlo allí sin considerar otras opciones, pedir dinero prestado no es algo que debas tomar a la ligera.
Lo ideal es analizar todas las opciones antes de pedir un préstamo, quizás ahorrando lo necesario puedas solventar aquel gasto que estás planeando realizar.
No pidas más dinero del que necesitas
Debes tener en cuenta que cuando solicites un préstamo deberás devolver la suma de dinero que te han prestado, más los intereses y comisiones por la operación. Lo cual hará que la suma total adeudada sea considerablemente mayor a la suma que solicitaste.
Por esto, es sumamente importante que a la hora de solicitar un préstamo ajustes lo máximo posible la cantidad que quieres solicitar, para evitar pagar mayores intereses.
Compara diferentes tipos de préstamos antes de sacar un crédito
Investiga sobre los tipos de préstamos, las diferentes tasas y plazos que ofrecen los bancos puede ser beneficioso.
Es importante informarse y conocer más antes de tomar una decisión. Teniendo en cuenta: la tasa de interés anual, tasa anual efectiva y otros gastos que pueden hacer que una oferta con una tasa de interés anual más baja sea más cara que otra con un interés más alto.
No te retrases con los pagos
Si ya consideraste otras opciones y estás en condiciones de sacar un préstamo, es muy importante que abones las cuotas en el plazo que se haya fijado en el contrato sin retrasos.
En tanto, si incumples con tus pagos, el prestamista puede penalizarte aplicando intereses por mora, los cuales suelen ser más elevados que los intereses ya aplicados.
Además, si la situación de incumplimiento se repite o dejas de abonar, tu deuda no desaparecerá, si no que será aún más elevada y podrían conllevar un embargo de tus bienes o tu sueldo.
Por esto, antes de pedir un crédito debes asegurarte de que puedes hacerle frente al pago de las cuotas del mismo cumpliendo con los plazos previstos.
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Cuidado con el dinero rápido y sin garantías
Cuando recurras a solicitar un préstamo a un banco, estos pueden solicitar una serie de garantías que demuestren tu solvencia económica y suelen tardar algunos días en confirmar que estás apto para prestarte dinero.
Si eres un trabajador autónomo o independiente deberás demostrar tu solvencia económica a través de facturas, extractos bancarios u otros documentos. Este proceso puede ser algo tedioso, sobre todo si estás frente a una situación de emergencia.
Existen otras entidades que ofrecen “dinero rápido” y sin necesidad de aportar garantías de pago. Debes ser cuidadoso con esta clase de entidades ya que suelen cobrarte intereses y comisiones mucho más elevadas que el resto de las entidades.
Recordá, antes de sacar un crédito, siempre es aconsejable averiguar todos los requisitos antes de ir a un banco y así realizar la operación de forma más rápida.
¡Contanos tu experiencia! Te leemos en los comentario
